jueves, 24 de julio de 2014

Este jueves, relato: La máquina del tiempo...


Hace días que observo impasible esa máquina que me han dejado a las puertas de mi casa. El lazo verde que la adorna  me parece desproporcionado, cómo tal vez la idea de utilizarla.

Ocupa mucho espacio- me digo cuando la miro. Me pregunto qué hacer con ella,  ahora precisamente” tiempo” me sobra, no quiero restar tal vez sumar, nada me devolverá las vivencias acontecidas y si fuera así ¿para qué vivirlo de nuevo?... Junté varios amigos y cada uno propuso, un tiempo, un acontecimiento, un lugar al donde trasladarnos. Y me dejé ir... Venecia,  un beso robado, cuatro esquinas, el empedrado brillando y un traje adamascado con una máscara cubriendo mi tez. Un lapsus y me respondí.
 - No viajaré, ni hacia atrás ni hacia adelante. Hay una máquina mucho más potente que esta, la fantasía, la magia y los sueños. Con ellos puedo ser quien quiera,  llenar mi vida  de lo que realmente deseo sin trasladarme, ¿por qué que es si no una máquina del tiempo?...

Volví a la realidad justo cuando el viaje acababa de iniciarse. Ha regresado con su remitente y adjunto va una tarjeta de agradecimiento en la que le he escrito unas amables palabras…

“Viajo a diario por el margen del tiempo que me ha tocado. El camino es siempre hacia adelante, hay quien dice que es “Ley de vida”, a veces los paisajes se vuelven escarpados, los acontecimientos me abruman y porque no decirlo, paso miedo… pero es mi espacio temporal, el que me han dado para gastar…Estoy escribiendo en mi presente, cada día que acaba me despido de mi pasado y miro de frente al futuro. Tengo mi propia máquina del tiempo y sus manecillas marcan el  ritmo acompasado de ese que dicen es mi corazón…Quiero vivir la magia de los sueños...”

Gracias,  pero como observará por mis palabras, no puedo aceptar su presente…

Pd.: Me quedo con el lazo para adornar tiempos esperanzados…


Más vaivenes temporales en el Blog de Mª José Moreno "Lugar de encuentro"